Adiós, Toto Saladito / Foto: rtve |
Qué risas anoche comentando por
Twitter (aprovecho para mandar un saludo a Momentos singluten) el primer programa de Masterchef tras la era de las
chaperoninas y que puedes ver aquí. Vamos a por la crónica gastrocatódica.
En esta ocasión, los aspirantes tuvieron que cocinar en pareja y por relevos. Como era de esperar y jalear, una de las parejas estuvo formada por nuestro antiguo Eje del Mal: Gonzalo y Marina. La prueba de presión consistió en elaborar magret de pato con salsa y risotto al gusto. La peor pareja se llevaba un delantal negro.
Momentazos:
- Pimpinela: Gonzalo dijo que quería demostrar a toda España que se lleva fenomenal con Marina. Claaro. Ella dijo que eran un “engranaje perfecto”. Claaro.
En Slytherin son muy competitivos |
- Celia, su tupé y su desconocimiento del magret: pensaba que era un tipo de cocción. Comprensible cuando eso no lo había cocinado ni la abuela ni la madre de la vegana en tránsito omnívoro. Jordi le dijo que estaba más perdida que un pingüino en el desierto.
- Gonzalo habla de Milagrosa como “la mayor de la casa”. Ayyyy, el lenguaje “granhermanil”.
- Enterarnos de que Emil I el Máster, llama a Cristóbal “El ruiseñor de los fogones”. Dentro de un rato, el pelo del granadino le dará la razón: Joselito´s style. Luego, Emil dio saltitos. Gran pareja, que consiguió la absolución hasta la semana que viene, a pesar de haber churruscado el magret. Su secreto, según Cristóbal, fue fusionarse “como Goku”. A riesgo de parecer tiquismiquis, querido Cristóbal, los que se fusionaban eran Trunks y Son Goten, vástagos de Vegeta y Goku respectivamente.
- Los nombres de los risottos: de invierno, de popurrí, de prado y bosque. Maemía.
- Las “mil técnicas” de Marina para hacer el magret. Ejem.
El peor dúo fue el formado por Celia
y Lorena DJ. Se ganaron un delantal negro.
Lorena intentando transmitir telepáticamente sus conocimientos a Celia. No lo consiguió / Foto: rtve |
Por cierto: ¿soy la única que odia
los platos de pizarra? Son muy guarretes. Destrucción ya.
El reto por equipos sufrió algunos
cambios en su dinámica. Para empezar, las capitanas fueron
Celia y Lorena DJ. Cristóbal y Emil I estaban exentos
de cocinar, lo que decepcionó a Emil. Para su suerte, nuestro Mateo
se cortó el dedo, no pudo cocinar y escogió a Emil para ocupar su
puesto. Esto alentado por Celia: “Mateo, por el amor de dios y por
la virgen”.
Dejadme llamar a mi caasa, teleefonooo. Que mi madre se va a preocupar / Foto: rtve |
El escenario elegido fue el hospital
Tavera de Toledo, aprovechando que se celebra el año de El
Greco, con motivo del IV centenario de la muerte del pintor.
Tuvieron que cocinar un menú manchego para 19 personalidades del
mundo del arte. El chef “invitado” fue el propio Pepe, que hizo
dos propuestas, sacadas de su restaurante, El Bohío. El equipo azul
escogió fritada de tomate y pimiento con huevo de pollita
escalfado, rape asado con guiso de garbanzos, cocochas y tripa
de bacalao. El equipo rojo, sopa de ajo con huevo escalfado,
perdiz a la toledana y un postre común: sopa de almendras con
manzana asada y regaliz.
Momentazos:
- Celia, cual Tolkien o Martin de la vida, inventa su propio palabro: “Nutriananda”. Etimología: sufijo “nutri” de nutrición y “ananda”, que en sánscrito, y según la creadora, significa felicidad suprema.
- La receta de sopa de ajo de Pepe. Aaargggfff. Y la de perdiz.
- La visita cultural que vivió Cristóbal de la mano de “Jonjenjonjen” (Pablo Hohenlohe). Sus conclusiones. El Greco fue un muchacho que era un auténtico crack, probablemente muy fan de la selección española por su paleta de rojos y del que conocemos el último cuadro que pintó en vida, por los demás, preguntad a Enrique de Vicente. El Caballero de la mano en el pecho es un mando de la Enterprise y el Archivo de Medinaceli es realmente la biblioteca de Hogwarts.
- El comedor. Los invitados.
Ha sido el barón Von Espeto, con el cuchillo y en el comedor / Foto: rtve |
- Aparece un comensal vegetariano. El equipo rojo decide preparar ¿jumus?
- El plástico en el huevo de Pablo Hohenlohe. Lorena pasó de pedir disculpas o sacar otro plato. Se quedó removiendo ollas.
- El triunfo del vegetariano, que comió mejor que los del rape seco y la perdiz cruda.
Lorena se llevó un buen rapapolvo de
El Jurado, su equipo no estuvo coordinado y ella no acepta las
críticas. Ganaron los delantales azules, aunque su capitana tuvo que
ir a la eliminatoria. Lo bueno es que nuestro Mateo tiene cancha para
recuperarse.
Cinco mujeres se enfrentaron en la
prueba de eliminación a dos postres emblemáticos de la
gastronomía italiana: el tiramisú y la panacotta. El
cocinero invitado fue Andrea Tumbarello, propietario del restaurante Don Giovanni. Se me saltaron unas
lágrimas como puños con su concepción de la gastronomía: “Yo
quiero ser feliz y compartir la felicidad”. Luego me acordé de mi condición de deslactosada e increpé puño en alto: ¿Porqué no puedo comeros?, oh, ricos postres lácteos.
Momentazos:
- Celia exclamando “¡qué belleza!” ante los ingredientes. Cuando les anunciaron que tendrían que hacer los postres, hizo un ruidito como arrfhfhg.
Arrrrfhfhfg |
- A nadie se le va a olvidar la consistencia perfecta de la panacotta: como teta sin silicona.
- Mateo dando grititos a Cristina para avisarle de que se le sale la leche. “¡Cris! Sopla, sopla, fiu, fiu”.
- Lorena, todo optimismo en diálogo con la cámara, nos demostró que como pitonisa no se ganaría la vida.
- La “sopita de tiramisú” mentolada de Marina. Los gestos de felicidad de Gonzalo viéndola fallar a la par que susurraba “!bien, Marinahhh, bien!”
Sopita de tiramisú / Foto: rtve |
- Pepe se come toda la panacotta de Vicky. “Se la ha comido como si fuera la última panacotta de su vida”, declaró la mallorquina, que mejora cada programa.
Me lo como tooo, los garbanzos del puchero y la liebre con arrooooz /Foto: rtve |
El Jurado deliberó que las dos peores
fueron Lorena y Marina y su sopita. Lorena a pesar de
aporrear con saña la panacotta, no consiguió desmoldarla hasta el
último momento.Además, el tiramisú estaba cortado y según lo
visto, El Jurado estaba cansado de su actitud. Tuvo que colgar
el delantal. Gonzalo, vas a tener que seguir odiando intensamente a Marina al menos
una semana más.
¿Qué os pareció a vosotros?
¿Pasasteis mucha hambre viendo el programa? Espero vuestros
comentarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario