No sé vosotros, pero yo soy incapaz de tomarme una sopa caliente en verano. Por eso, cuando Esposo llegó el otro día de la biblioteca con varios libros de cocina, me puse a buscar inspiración deslactosada para combatir el calor.
La receta que primero me llamó la
atención fue un gazpacho típico del pueblo jiennense de Ibros y que
aparece en el recetario Cocina tradicional de Ibros, de
Pepi Cabrera Hurtado y Beli Chinchilla Hurtado. He hecho pequeños
cambios con respecto a la receta original. No he puesto pan y he
añadido pimienta y unos cominos al aliño, pero en esencia es igual.
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| Me encantan los recetarios tradicionales |
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| El tomate es de la vega de Graná |
Ingredientes:
- 1 manzana
- 1 pepino
- 1 tomate
- ½ cebolleta
- AOVE (he usado variedad arbequina)
- Vinagre de manzana
- Comino molido
- Sal
- Pimienta
Elaboración paso a paso:
Lavamos bien nuestros vegetales. Picamos la media cebolleta en trozos muy pequeños y la ponemos en un bol grande.
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| Me declaro muy fans de la cebolleta |
Pelamos el pepino y el tomate
y los cortamos en cuadritos pequeños. Si no quieres pelar el tomate,
es opcional, simplemente me gusta más. Añadimos al bol.
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| Picar y volcar, picar y volcar |
Descorazonamos la manzana y la
rociamos con limón, para que no se oxide. Yo le dejo la piel,
pero es opcional. Cortamos en trozos menudos y añadimos al resto de
ingredientes.
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| Arrancando corazones a lo Templo Maldito |
Aliñamos al gusto con sal,
pimienta, comino molido, vinagre de manzana y un buen aceite de oliva
virgen extra de la variedad que prefieras, yo he escogido arbequina.
Finalizamos poniendo agua al
gusto. Debe servirse muy frío, incluso se puede añadir un
poco de hielo justo antes de llevarlo a la mesa.
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| Mejor si usas agua bien fría |
Es una receta muy refrescante y ligera,
¡espero que os guste y comentéis si os decidís a prepararla!
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