Top Chef 13:Soufflemientos rellenos de petite fantaisie en salsita potente de bivalvo

Damnificado por Querido Líder / Fotos originales: Atresmedia

Querido Líder lo ha vuelto a hacer. Otra muesca en el mango de su cuchillo. Otro competidor fulminado en Top Chef. Su hegemonía se ha afianzado tras eliminar a Víctor en un programa que puedes ver aquí y que vamos a despiezar en una nueva y deslactosada ¡Crónica Gastrocatódica!

La primera prueba no sirvió para conseguir la inmunidad, sino para obtener un privilegio. El objetivo fue elaborar el mejor soufflé, que debe ser el “dividir con decimales” de la cocina, ya que todos confesaron que no habían preparado uno desde que dejaron la escuela. Fran, como buen empollón, era el más agobiado y consciente de la dificultad. El invitado fue el chef Fernando Canales, un experto en soufflés que preparó en directo uno de chistorra con pintaca estelar. Además explicó que el secreto está en batir las claras con cuidado para conseguir una burbuja más fina.

Momentazos:

• Fernando Canales, con todo el sentido común del mundo, preguntando a Chicote: “¿Por qué corren? Lo más importante es pensar”. Jajaja.

• Los problemas de identidad del soufflé de Querido Líder: aquello parecía más una (arga)masa de croquetas “batalleras”, según opinó Chicote.

Fernando Canales y Chicote en pleno exorcismo al soufflé de Marc
/ Fotos originales: Atresmedia

• Fran y su “soufflemiento”. Se quedó sin tiempo y tuvo que lanzar por los aires el soufflé para llegar. Para colmo, se le quedó crudo.

• Víctor, que utilizó albúmina para estabilizar el soufflé. Sus compañeros criticaron la jugada: Marc reconoció que había sido más listo, mientras que un indignado David aseguró que no le gustaba la “cocina de polvos”.

• Fernando Canales haciéndole la autopsia al soufflé de Víctor para comprobar la textura. El sabor no gustó al chef, que consideró que no tenía “armonía palatial”. No termino de entender la obsesión de los cocineros por acuñar palabros.

Según la temperatura del hígado, estos soufflés llevan siglos muertos
 / Fotos originales: Atresmedia

• Víctor: se llamó a sí mismo “Víctor-Predictor”, ya que estaba convencido de que vencería en la prueba. Ganó. Si algún día se cansa de ser cocinero, siempre puede meterse a pitoniso.

La segunda prueba podía haberse llamado “la mezcla imposible”. Todos los concursantes partían con los mismos ingredientes: alitas de pollo, melocotones, vino tinto, salmón y ¡chuches! Debían utilizarlos todos en un plato. Además, Víctor-Predictor contó con una ventaja: asignar a sus rivales otros productos para dificultarles el trabajo. A Fran le colocó unas galletas y a Querido Líder unos arenques. Como jurado de honor, contaron con Albert Raurich, Eduard Bosch y Oriol Castro, que fueron miembros del equipo creativo de El Bulli.

Diversas reacciones a la instauración de la chuchecracia en Top Chef
/ Fotos originales: Atresmedia

Momentazos:

• Marc, imbuido por el espíritu de un primo de Dalí que se le parecía mucho, exclamó que iba a preparar una, ejem, “petite fantaisie surréaliste”. El cursilómetro estalló al escuchar tan tremenda denominación.

• David, todo coherencia, se puso a experimentar con lo que definió como “cocina química”. Criatura: toooda la cocina es química. Física también. “¿Tenéis texturas por ahí?”, se desgañitaba. La estrategia le funcionó y se convirtió en el primer semifinalista de Top Chef.

• Fran y su lógica. Para él, poner las gominolas “por todos lados” era la única solución sensata. Errrr.

• A Víctor-Predictor se le pasa el salmón. Chicote le advierte. Víctor decide caramelizar el pescado recocido. Chicote le vuelve a avisar: “Me temo que (al salmón) no le va a gustar”. ¿Estaría perdiendo sus dotes adivinatorias? Yayo sentenció: “¿Sabes cuál es el problema de tu plato? Los platos de tus tres compañeros”.

Víctor se ríe porque todavía no sabe que va a ser derrotado por Querido Líder

/ Fotos originales: Atresmedia

El dúo Puñaladitas, Marc y Víctor, fueron directos a la Última oportunidad acompañados por Fran. El reto consistió en reproducir a ciegas un plato de Yayo Daporta: una merluza con gelatina de moluscos, almejas, tallarines de alga wakame, fideos de calabacín y zanahoria y pil pil de codium.

Momentazos:

• Víctor-Predictor y su confesión: se había estudiado los platos de El Jurado antes de entrar al concurso. En la cata a ciegas, olfateó y masajeó el lomo de merluza con el estilo Gollum al que nos tiene acostumbrados. Pero decidió copiar la versión que ya conocía y no se guió por lo que había probado. Error.

El cocinero que susurraba a los lomos de merluza / Fotos originales: Atresmedia

• David, en pleno ataque de horror vacui: como estaba solo, se dedicó a hablarle al éter mientras juzgaban a sus compañeros. “Qué buena pinta la salsita”, murmuraba. “Creo que los tres se han dado cuenta de que no se parece al real”, aventuró. Y así todo el rato.

• Chicote metiendo el morro en el plato de Querido Líder para encontrar el “rollo marino”. Todavía lo anda buscando.

El Jurado deliberó que la réplica de Fran fue la mejor y la eliminación se resolvió entre Víctor- Predictor y Marc Jong-Li, también conocidos como dúo Puñaladitas por su capacidad para criticarse mutuamente y a los demás. Víctor tuvo que recoger sus cuchillos. Uno a uno, Marc va liquidando rivales como la máquina definitiva de destrucción y caos que es. Víctor nos dejó con unas elegantes declaraciones sobre su odiado Fran: “Está castrado por la doctrina de su jefe”.

Aniquilar humanos, destrozar humanos  / Fotos originales: Atresmedia

Vosotros qué pensáis de la marcha de Víctor-Predictor? ¿Os pareció justa? Espero vuestros comentarios.