miércoles, 19 de noviembre de 2014

Top Chef 10: madre infusionada con hinojo y paella carlicida

Yo soy así y así seguiré, nunca cambiaréee / Fotos originales: Atresplayer
No hay concurso gastrocatódico que no tenga sus días de glorificación materno-lacrimógena. Lo bueno es que en el último Top Chef, que puedes ver aquí, se derribó el tópico de que todas las madres del mundo son Estrellas Michelín en potencia. Además, asistimos a la eliminación de QuimiKarlos, el Niño Probeta, la furia japónido-valenciana. Os lo cuento todo en esta nueva y deslactosada Crónica Gastrocatódica.

Para dosificar la emoción, la primera aparición de las madres de los concursantes fue a través de un vídeo en el que recordaban el plato preferido de infancia de sus vástagos. Primeras lágrimas y pucheros (de los gestuales y de los de poner al fuego). También lloraron Susi y Yayo, a los que Chicote sorprendió con sus recetas favoritas de la infancia, ambas cocinadas por sus abuelas. Yo ahí casi lloro, pero de pensar en lo rico que tiene que estar el "arroz clarico de la abuela Paloma". La Prueba de fuego para conseguir la inmunidad consistió en adaptar estos platos de la niñez. Un magdalenazo de Proust en toda regla.

¿Se ríen Víctor y Marc porque pueden ver el futuro? / Fotos originales: Atresplayer

Momentazos:
  • Chicote a QuimiKarlos: “Cuando te vea con una sartén en la mano, no me lo voy a creer”. Nuestro Niño Probeta parecía otra persona, no cambió en nada la receta de pisto de su abuela. Además, descubrimos que no es tan malvado como parece, ya que cuidó de su abuela durante sus últimos años. Más lágrimas.
  • Víctor intentando esferificar un cocido. Cocido esferificado = oxímoron. Que no, vaya.
El cocido se rebeló y no quiso esferificarse / Fotos originales: Atresplayer
  • El Jurado, que, en mi opinión, acertó al no comunicar a los concursantes quién era el ganador hasta el final de la siguiente prueba. Querían evitar el “melasudismo” que suele presentar el inmune. Ganó Querido Líder.
En un giro de guion inusitado (guiño, guiño), el programa invitó a las progenitoras de los concursantes para que ejercieran de pinches de sus retoños. Llegaron en anacrónico carruaje. Las madres comenzarían el plato propuesto, unos canelones que debían elaborar sin usar pasta. Sus hijos entrarían en cocina quince minutos después para continuarlo. Lo que no sabían es que serían sus propios familiares los encargados de valorar los platos en una cata a ciegas.

Momentazos:
  • Amparo, la madre de Carlos, y su paso estelar por Top Chef. Digamos que la cocina es para ella un destino turístico exótico. No sabía ni lo que era una olla. El horror se apoderó de Niño Probeta cuando vio lo que su madre estaba preparando: “Entro y veo a mi madre asesinando a una merluza”, declaró dominado por el pavor.
La interfecta. Requiéscat in pace / Fotos originales: Atresplayer
  • La madre de Víctor, que desde el primer momento agarró la bombona de nitrógeno para su querubín de risa psicópata.
  • Chicote a Amparo al ver sus esfuerzos por filetear la merluza: “Es importante acabar con los mismos dedos con los que uno ha empezado”.
  • La madre de Peña, que eligió unos carabineros tamaño “acunable entre los brazos” para el relleno de sus canelones. “¡Toma, vaya carabineros de los gordos!”, celebró Chicote.
  • El hinojo, inesperado protagonista de la noche y la kriptonita de Carlos. La madre de Niño Probeta se desgañitaba en la cocina: “¡El hinojo, Carlos, más hinojooooo, por favoooor!”. Carlos estaba cada vez más desconcertado y furioso: “Mamá, ¿qué te ha dado con el hinojo?”. “Es el sabor anisado lo que me gusta”, replicó ella. Su vástago indómito estaba cada vez más enfadado y la trató fatal. Muy mal, Niño Probeta, malo, malo.
Si dices hinojo tres veces delante de un espejo y a oscuras, se te aparecen Carlos y su madre
 y te preparan sus canelones / Fotos originales: Atresplayer
Los familiares votaron. Peña, David y por supuesto, Carlos, acabaron en la Última oportunidad. La prueba consistía en reinterpretar un plato tradicional de sus regiones de origen; Valencia, Castilla y León y Cataluña . Para inspirarles, contaron con la visita del chef Pedro Mario, que preparó una sopa castellana con una pintaza espectacular.

Momentazos:
  • Carlos duda: “Paella, ¿Cómo?”. Peña, al más puro estilo del amigo del héroe, le recuerda quién es: “Eres el Niño Probeta, métela (sic) nitrógeno”. Y QuimiKarlos desplegó su “genialidad” y pensó en un helado caliente de pollo. Iiiiigggggg. Luego se puso a hacer esferificaciones y le falló el alginato. “Es una reinterpretación genial que puede ganar”, decía. “Estoy en la mierda”, aseguraba después. QuimiKarlos se había subido a la rueda de la ciclotimia. 
  • La cara de satisfacción de Querido Líder ante los comentarios negativos de El Jurado y los intentos de Carlos por justificar su plato: “Es que no entiendes”, le soltó a Susi. Víctor, que se olía la eliminación del Niño Probeta, hizo un movimiento estratégico de acercamiento a Marc Jong-Li.
Querido Líder ganando adeptos al régimen  / Fotos originales: Atresplayer
  • El Niño Probeta y su mal perder: “No me gustan las paellas, no me gusta la cocina tradicional de las paellas (…) Lo único que se me ocurre típico es horchata con fartons y paella”. “Si llego a saber que esto es lo que había que hacer (…) hubiese hecho la mierda de cocina clásica que han hecho mis compañeros”. Luego montó a sus compañeros un numerito “drama king (size)”. Marc quiso pincharle y QuimiKarlos decidió irse, imagino que para no perpetrar un asesinato.
Marc Jong-Li, has ganado esta batalla, pero, ¿Volverá Niño Probeta?  / Fotos originales: Atresplayer
Querido Líder ha ganado el duelo...por ahora. La semana que viene hay nueva repesca. ¿Viviremos la venganza de Carlos? ¿Volveremos a disfrutar del pelazo de Honorato? ¿Será Fran, al que nunca entendimos que echaran? ¿Pensáis que la mejor madre gastrocatódica es la de Vicky o que Amparo la ha destronado? Espero vuestros comentarios.

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